10 de noviembre del 2.022

LAS CONDUCTAS DESAFIANTES, suelen darse entre los 2 Y 5 años. Es la llamada “Fase de negación” en la que aparecen las temidas rabietas y la CABEZONERÍA.

Los padres y adultos que estamos alrededor, necesitamos MANTENER la paciencia y permanecer tranquilos, ya que se trata de un periodo importante en el desarrollo infantil. ES LA LLAMADA «fase de autoafirmación»

¿QUÉ DEBEMOS HACER ANTE UN DESAFÍO?

DEBEMOS mantener la calma en el momento del conflicto, aprender a corregir la conducta sin alterarnos y posponer la reflexión sobre ello, a un momento posterior, cuando la tormenta ya haya pasado y cuando todo esté más calmado. Es importante, para conseguir esto, tener en cuenta los siguientes consejos e intentar ponerlos en práctica:

Establecer límites coherentes sin ser ni muy duros, ni muy permisivos. Serán defendibles en cualquier momento y no nos harán sentirnos culpables.

Poner consecuencias y aplicarlas de forma inmediata, siendo muy constantes, siendo firmes y aplicándolas siempre que ocurran este tipo de conductas.

Refuerzo positivo Siempre que obedezcan y colaboren, reforzaremos el cambio de conducta con elogios y cariño. Esto despertará en el niño una gran MOTIVACIÖN encaminada a la resolución del conflicto.

No entrar al juego, manteniendo la calma en todo momento,Explicar con serenidad, las consecuencias que conlleva su comportamiento. Evitar el típico comentario de “Porque lo digo yo”

Es importante que los adultos que estamos a su alrededor entendamos que este tipo de conductas forman parte de un proceso evolutivo por el que los niños tienen que pasar y que es nuestro DEBER, como adultos, consiste en ayudarles y enseñarles a gestionar todos estos procesos correctamente.